Por fin se ha consumado el fichaje más anunciado que recuerda la Bundesliga en los últimos tiempos. Robert Lewandowski, estrella polaca, ficha por el Bayern de Múnich, donde jugará las próximas cinco temporadas. ¿Qué consecuencias trae su traspaso para el equipo de Guardiola, para el Dortmund, y qué supone para el propio jugador y la liga alemana?
Si se hace memoria, el fichaje de Lewandowski, es antagónico a lo que fue el traspaso del también jugador del Dortmund, Mario Götze. Este cayo como una bomba en el vestuario, por eso de lo inesperado. La marcha de Lewandowski ya estaba escrita desde hace mucho. No pilla a nadie por sorpresa. A pesar de los desmentidos, las continuas entrevistas que no dejaban nada claro, fotos de visitas a reconocimientos médicos, todo el mundo daba por hecho que el delantero iba a jugar la temporada que viene en el equipo que entrena Pep Guardiola. Pero más allá del teatro generado, conviene analizar qué es lo que significa el traspaso para los dos equipos implicados, para el propio jugador y la Bundesliga.
Bayern de Múnich: Uno de los delanteros más en forma estaba en el mercado, y eso a precio de saldo. El jugador acaba contrato esta temporada por lo que podía fichar por cualquier equipo sin que éste tuviera que pagar traspaso alguno. Ningún equipo le hace ascos a tan jugoso plato. Con razón el Bayern puede sacar pecho del fichaje. Seguramente había más de un equipo puntero de Europa dispuesto a incorporar a Lewandowski. ¿Entre ellos el Real Madrid? Nunca se sabrá. Algunos llegaron a afirmar que después del partido de semis de Champions League de la temporada pasada, el jugador firmó un precontrato en el mismísimo despacho de Florentino Pérez. Demuestra que la fantasía de algunos periodistas deportivos da para mucho.
¿Pero encaja Lewandowski en Múnich? Eso precisamente no queda muy claro. Con Mario Mandzukic el puesto de delantero centro está más que cubierto. Salvo milagro, será muy raro ver jugar a los dos al mismo tiempo. También está la incógnita Guardiola. No se sabe lo que el entrenador opina del fichaje. Nunca ha hecho declaraciones al respecto y se especula incluso con que dejó caer que el fichaje del polaco no era muy necesario. Lo que está claro, es que al catalán también le gusta jugar sin delantero de vez en cuando. El tiempo dirá, pero a priori, Lewandowski parte de cero y Guardiola no se casa con nadie. Adiós a la titularidad indiscutible.
Borussia Dortmund: El Dortmund le echó coraje al negarse al traspaso en verano. Supuso enterrar los 25 millones de euros que ofrecía el Bayern. Ahora se va a coste cero. Parece ser que la dirección deportiva del Dortmund no leyó bien las cartas. Nada más lejos. Lewandowski sigue enchufado. Ha demostrado su profesionalidad. Once goles en la Bundesliga y cuatro en Champions así lo demuestran. Sin sus goles el Dortmund no estaría muy bien posicionado. Además se mandó una clara señal a la afición. Muy dolida tras el traspaso, de lo que hasta entonces había sido su jugador preferido, Mario Götze. Insistieron en el cumplimiento del contrato. Algo de agradecer en el mundo del fútbol, donde un contrato no suele valer más que la tinta con el que está firmado. El Dortmund también ha ganado tiempo para buscar tranquilamente un sustituto adecuado. Aunque parece ser que la suerte lo ha abandonado un poco en este sentido. Ni la marcha de Kagawa, ni la de Götze, se han podido suplir del todo. Deben acertar si no quieren ver la Champions por el televisor en un futuro.
Bundesliga: Hay dos lecturas posibles. Por un lado está la positiva. Se queda en Alemania. Es una delicia verlo jugar, sobre todo de espaldas a la portería. Los aficionados de la Bundesliga podrán seguir disfrutando de él. La negativa, el Bayern de Múnich afianza su liderazgo a base de debilitar las plantillas de rivales directos. Se prevé una liga bastante aburrida, en lo que a la carrera por el título se refiere.
Robert Lewandowski: El polaco está ansioso por ganar títulos. En ningún equipo alemán tiene la misma posibilidad que en el Bayern. Nadie puede negarle a un jugador su deseo por mejorar. Al aumento en la nómina tampoco le hace feos. Se especula con una ficha de nueve millones anuales. En Dortmund rondaba los cinco. Pero la lista de jugadores que se han enriquecido en Múnich, pero no han conseguido la felicidad es larga. Lewandowski parece ser demasiado bueno para que le pase ésto. Admirable sin duda, la estoicidad con la que ha llevado todo el 'run run' generado en torno a su figura en los últimos tiempos. Se quejó de que no pudiera fichar en verano, pero a partir de ahí, fue todo un profesional sobre el campo.